La
verdad que el relato de aquellos Magos me pilló totalmente desprevenido… ¿Un
rey? ¿En mi territorio? ¿A caso alguien pretende destronarme? Fui meticuloso,
me informé de cada detalle y bueno me hice un gran conocedor de la historia, de
las lecturas, acudí a las profecías, escudriñé a través de lo contado por los Magos,
incluso me hice pasar por un seguidor más del futuro Mesías… Las cosas que
decían eran preciosas, a veces incluso llegue a dudar de si todo aquello no
sería cierto, un cuento muy bonito… Pero al fin y al cabo como todos los
cuentos, algo idílico, perturbador e incluso peligroso. Os puede parecer una
locura la decisión que tomé, pero era lo mejor… Imaginad que hubieran dicho
desde Roma, si se enteran de lo que he permitido, si se enteran que fui
cómplice, si se enteran de que yo sabía y tenía conocimiento de aquel hecho
extra-ordinario.
Hubiera
sido una masacre para todo mi pueblo y por supuesto para mí. Me podéis
llamar egoísta y pensar que soy el malo… pero ¿y vosotros? ¿Qué hacéis con ese
mensaje tan bonito con el que os encontráis? Para llevar el tren de vida que
tenéis, ¿qué sacrificios tienen que hacer otros? Yo al menos soy consciente de
lo que hice y porqué. Quizá vosotros ni siquiera sepáis de vuestra complicidad
en la desigualdad, en las muertes de los prójimos y sus sacrificios. Puede ser
que creáis que no podéis hacer nada en el orden mundial… pero es una excusa
como yo utilicé mil y una para justificar aquello. Yo soy Herodes, el malo
malísimo, el asesino de niños, el que sacrificó toda una generación por un bien
mayor… pero ¿y vosotros quienes sois?
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