LA CONSTANCIA QUE VENCE…
Constancia significa: Firmeza y perseverancia del ánimo en las resoluciones y en los propósitos. Persistir actuando con permanencia en algo, por el tiempo que sea necesario.
”Tener un hijo, plantar un árbol y escribir un libro…” es fácil , lo
difícil es: Criar un hijo, regar un
árbol y que alguien lea el libro…
Uno de los rasgos
más importantes del carácter cristiano es la constancia. Dios plantea un concepto de paciencia y
constancia al que el hombre escapa, no nos sale naturalmente esta cualidad,
pero es un atributo que debemos aprender a cultivar, la Escritura dice que
aquel que persevere hasta el fin será salvo.
La constancia en el
Hno. Gabriel fue la expresión de su fe en Dios, de su ilimitada confianza en la
Divina Providencia y de la certeza de alcanzar así el céntuplo y la vida
eterna prometida por Cristo.
Los que le conocieron
personalmente o a través de sus primeros discípulos, están de acuerdo en
afirmar la presencia en él de esta virtud:
"La fe viva, la
sencillez, la fuerza de voluntad del Hno. Gabriel, su paciencia y su confianza
en Dios, su perseverancia que nada es capaz de doblegar, todo inspira una
afectuosa simpatía hacia esa hermosa alma. Pruebas, decepciones y fracasos no
le faltaron, pero su deseo de trabajar al servicio de Dios y dedicarse a la
educación cristiana de la niñez, acabaron por triunfar de todo obstáculo".
(Positio, p. 1110)